Padres

La vida me regalo un padre muy bueno, no recuerdo mucho de él, pero la gente que lo conoce solo maravillas cuenta de él.
Fue un hombre trabajador, aplicado, amoroso, noble, protector. Un doctor con espiritu de servicio, con un don muy especial, que dío su vida por alguién más.
La vida tambien me regalo la oportunidad de conocer a un padre que cumple años la misma fecha de mi papá, un padre amoroso, cariñoso, noble y especial. Que cuando habla de sus hijos se le dibuja la sonrisa más linda y sus ojos brillan magicamente, a veces se le ponen vidriosos, pero él los ama con todo su ser, él sabe expresarles su amor, su cariño, su entrega, los cuida, les cocina, juega con ellos, les leen libros y bailan juntos. Los lleva al parque, a los museos a comer helado y los tres sonrien de felicidad.
También conozco un padre frío, alejado, sin amor, uno que no merecia ser padre, porque para él tener un hijo es como tener un carro nuevo. Ese padre se pierde del mejor amor del mundo, el de sus hijos, el solo se ama así mismo.
Hasta la fecha mi padre forma parte de mi vida, el padre que cumple años el mismo día de mi papá también forma parte de mi vida, a los dos los amo, de diferente manera, pero los amo, se que han sido pacientes conmigo. Mi padre es mi ángel que me acompaña en todo instante y mi otro ángel es el ser que me hizo crecer y comprender que uno debe de pensar todo lo que hace en la vida y que su amor se encuentra intacto en mi corazón. El otro padre, el otro padre es un padre egoísta, vacío, que no conoce que la esencia de la vida es el amor...